Por: Frank Powell

Estas 10 reglas con respecto a las citas, podrían cambiar tu futuro para mejor. Confía en mí.
Es hora que los cristianos comiencen a hablar acerca de este tema. La trayectoria de las vidas y eternidades penden de un hilo.
«Cuidado allí. ¡Estás comenzando con algo muy fuerte!”
Sí lo estoy. Iglesia, este tema da forma a nuestros jóvenes, amigos, y familia, más que lo que pudiéramos imaginar. Y hemos sido pasivos durante mucho tiempo. “Vamos a sentarnos y ver qué pasa” podría funcionar en ciertos escenarios, pero las citas cristianas no es uno de ellos.
Establecer principios para ello, podría fijar el curso para hombres y mujeres, hacia matrimonios centrados en Cristo. Trazar directrices para las citas, como seguidores de Jesús, podría alterar las vidas de hombres y mujeres, alejándolos de relaciones tóxicas y nada saludables (y finalmente, matrimonios).
Lo más importante, las directrices y principios para salir, podrían transformar vidas y formar eternidades.
Por lo tanto, esto es increíblemente importante. Y tenemos la responsabilidad como hombres y mujeres de Dios, de ser proactivos. Pero no podemos ser proactivos a menos que se establezcan principios. Así que yo comienzo la conversación.
Espero y oro para que las palabras de esta publicación, provoque conversaciones en sus ministerios, relaciones y hogares. Aquí, 10 principios realmente importantes para las salidas (citas) cristianas.
Deja de buscar al “elegido”
«Frank, ¿cómo sabré cuando encuentre al ‘elegido’?”
No lo sabrás. Sobre todo, porque “el elegido” no existe. La verdad es que podrías pasar tu vida con más de una persona. Si necesitas tomarte un minuto para recobrarte del impacto, estaré aquí cuando regreses.
Muy bien, feliz de que hayas vuelto. Este es el asunto: Dios no creo el matrimonio como una lotería divina, donde cada persona tiene un ticket ganador. Eso haría de Dios, un apostador, y la Biblia dice que las apuestas son del diablo (es una broma). Pero “el elegido” pinta a Dios de esa manera.
Mira, el matrimonio no se trata tanto de encontrar a alguien totalmente compatible, se trata de comprometerse con alguien, a pesar de las dificultades y diferencias.
“El elegido” dice que necesitas encontrar a la persona perfecta. Y el descubrir un defecto significa salir huyendo
Salir en citas con una trayectoria hacia el matrimonio significa salir con un propósito.
Pero la belleza del matrimonio es que Dios te sustenta a pesar de tus defectos. El quebranto que ves en ti mismo y el que experimentas de tu cónyuge, ambos apuntan a la única persona perfecta, Dios.
Ten citas con la trayectoria hacia el matrimonio
Esta cita lo resume:
“Salir sin la intención de casarte ese como ir a la tienda sin dinero. O te deja insatisfecho, o tomas algo que no es tuyo.”—Jefferson Bethke
Si eres cristiano, no hay razón para salir sin una trayectoria hacia el matrimonio. Ahora, quiero aclarar lo que quiero decir.
Salir en citas con una trayectoria hacia el matrimonio significa salir con un propósito. Significa salir con un entendimiento del evangelio. Significa salir con alguien que cumple los valores y metas que tienes para un futuro cónyuge (más sobre esto, más adelante.)
Las citas casuales o sin propósito, no tiene ningún beneficio para los cristianos. Somos seres intencionales. Estamos diseñados para saber por qué hacemos las cosas y a dónde estamos yendo. En las citas, no es diferente.
Ahora, por favor, por favor, por favor, no seas un bicho raro extravagante. Salir con el propósito del matrimonio, no significa que solo debes salir con una persona por siempre. Eso sería increíble, pero no siempre es realista.
Es posible entrar en una relación con alguien que ama a Jesús, que cumple los valores que tienes en un futuro cónyuge, y que sea compatible contigo. Pero una vez que estás en la relación, te das cuenta que las cosas no son como parecían. Eso siempre es un factor decisivo.
Solo termina la relación y continúa buscando al Señor.
Descargo: Una salida no es una cita. Una vez más, por favor no seas un bicho raro extravagante, ni les des a los cristianos un nivel negativo. Tomar un café o ir a cenar con alguien del sexo opuesto, no es una cita. Salir en una cita es más íntimo. Involucra conversaciones en las que se habla del muto entendimiento de una relación romántica. Involucra compartir luchas personales y vulnerabilidad.
Así que, si decides no tomar un café o ir al cine con alguien del sexo opuesto, no importa. Pero no pongas esa expectativa en los demás.
No Salgas Con No-Cristianos
El propósito principal del matrimonio es la santificación (llegar a ser más como Dios). Entonces, mi pregunta es, “¿Cómo puede ayudarte en esto el salir con un no-cristiano?”
Si eres cristiano, Dios no es una parte de tu vida. Él es tu vida. ¿Por qué salir con alguien que ni siquiera tiene a Dios como parte de su vida?”.
Mi esposa ama al Señor, y puedo decir con toda certeza que yo no estaría siguiendo a Jesús sin ella. Habrá días cuando la vida se viene abajo, tu fe se tambalea, y lo único que te queda es tu cónyuge. Esta es la belleza de un matrimonio santificado. En este escenario, tu cónyuge está allí para orar por ti, poner su brazo alrededor de ti y caminar contigo.
Hay una peligrosa mentalidad en los círculos cristianos, que quiero abordar… «saliendo para convertir».
Sin un espos@ cristian@, una de dos cosas ocurre: Te alejarás de Dios, o tu cónyuge se convertirá en tu dios funcional (más sobre esto más adelante). Ambos están mal.
Hay otra peligrosa mentalidad en los círculos cristianos, que quiero abordar… “saliendo para convertir.”
Mira, los cristianos están llamados a ser misioneros. El mundo de las citas, sin embargo, no ese el lugar para ser un misionero. No permitas que el orgullo te engañe. No puedes cambiar a alguien. Ese es trabajo de Dios.
Así que, sal con cristianos. Cásate con alguien que ame a Jesús. Y difundan juntos el evangelio.
Ten Una Lista De Valores Y No Transijas Con Ellos
Si no tienes idea de qué valores son importantes para ti, en un futuro cónyuge, sal del camino hacia el matrimonio. Hazte a un lado en la gasolinera más cercana y decide lo que quieres en un futuro esposo o esposa. Es peligroso ir por el camino hacia el matrimonio, sin una idea de a dónde estás yendo.
Ahora, cuando hagas esta lista, no seas legalista. No sientes a alguien en la primera cita y le entrevistes para asegurarte que cumple con todas las cualidades. Eso es algo raro y caprichoso. Una vez más, no nos des a todos los demás un mal nombre. Tu lista está diseñada para darte un marco para las citas, no para que sea una lista de comprobación para ellas.
Por otra parte, no transijas. Tu corazón y la santidad del matrimonio son demasiado importantes como para darles ligereza, porque te sientes frustrado o impaciente.
Una cosa más: ten valores primarios y secundarios. Y fíltralos apropiadamente.
Practiquemos. Si crees que Dios está preparándote para misiones en el extranjero, ¿es importante que la persona con la que te cases, comparta esta pasión? Sí… este es el valor primario. Si te encanta un equipo de fútbol y a tu cónyuge le gusta otro, ¿es importante trabajar en esto antes del matrimonio? No… este es un valor secundario.
Los valores primarios son probablemente factores de extrema importancia. Los secundarios, probablemente no.
No Uses Una “Escopeta” En Las Citas
¿Alguna vez manejaste una escopeta? Si no lo hiciste, déjame contarte. Los cascos se rellenan con pequeñas bolas redondas. Cuando jalas del gatillo, estas bolas son repartidas en un amplio rango, aumentando la posibilidad de darle al blanco. Esto es grandioso para cazar… terrible para las citas.
«Vamos a ver. Voy a pedir a 20 chicos / chicas que salgan conmigo. Cinco de esos podrían ser guardados, esperando que uno termine siendo mi cónyuge.”
No es una buena idea. Temo que esta mentalidad en la cultura de las salidas está realmente promoviendo el divorcio. Déjame explicarte.
La cultura dice, “Sale con todos. Está bien. Conócete a ti mismo.” Y tan pronto como la persona con la que estás saliendo, te decepcione, sal huyendo. De modo que lo que se ha determinado por años es salir tan pronto como surja un defecto. De repente, cuando el matrimonio comienza, se enciende el interruptor.
Se te pide que cambies, de una mentalidad que dice “Termina una relación tan pronto como surja la dificultado,” a una que dice, “No termines la relación, aunque surjan las dificultades.”
Eso es algo difícil de manejar. Sal con una trayectoria marcada hacia el matrimonio. Sal intencionalmente.
Está Bien Querer Casarse
Deseas el matrimonio. Gloria a Dios. Él te da ese deseo. Déjame probarlo.
El primer caso en la Biblia en el que Dios no se complace de lo que ve, es cuando Adán está viviendo en el Jardín del Edén, solo (Gén. 2:18). Dios sabe que no es bueno para el hombre, estar solo. Entra Eva, la procreación y el matrimonio (no necesariamente en ese orden).
Las personas están creadas para estar en comunidad. Y la comunidad más íntima sobre la tierra, es la relación que tendrás con tu cónyuge. Así que, ora a Dios para que te envíe un/a esposo/a. Pero no permitas que el deseo consuma tu vida.
Sé paciente. Espera en el Señor. Si estás seguro que Dios te ha llamado a casarte, Él proveerá.
Está Bien NO Casarse
Mientras que el matrimonio es un gran santificador, no es algo que Dios dice que ese obligatorio. Si no estás listo para el matrimonio, o si no quieres casarte, no estás pecando.
Me temo que la comunidad cristiana ha coaccionada irresponsablemente a los hombres y a las mujeres al matrimonio, a través de la presión cultural. Debe haber una ordenanza secreta transmitida desde los padres de la iglesia, para que una vez que alcanzas los 25 años, se te hace la pregunta, casi semanalmente… “¿Cuándo te casarás?”
Si no estás listo para salir en una cita, no permitas que la presión cultural anule el plan de Dios.
¿Puedes imaginar cómo el escuchar constantemente esta pregunta de amigos, familia y ancianas confianzudas de la iglesia, pueden hacer que las personas piensen que tienen un problema?
Si no estás listo para salir en una cita, no permitas que la presión cultural anule el plan de Dios.
Advertencia: Si eres soltero, entiende que es tu responsabilidad administrar tu tiempo bien. La soltería es un regalo de Dios, pero no es una excusa para ser perezoso. Ese una oportunidad para servir al Señor.
Ten Una Comunidad Cristiana Alrededor De Ti, Y Escúchalos
No salgas solo. Esto suena débil. Pero también lo es casarse con una bola de sordidez.
Cuando salgas, permite que la comunidad de personas alrededor hable en tu relación. Tus sentimientos pueden engañarte. Tus amigos son capaces de ver inconsistencias y problemas que no puedes ver porque estás fuera de la tormenta.
Conozco demasiados hombres y mujeres que se negaron a escuchar a la gente que los rodeaba, y su orgullosa arrogancia resultó en un matrimonio fallido. No caigas en esta categoría. Encuentra hombres y mujeres en quienes confiar, y permíteles hablarte sobre la relación.
Busca La Pureza De Mente
“El sexo antes del matrimonio ese malo.” Esta fue la amplitud de mi entendimiento de las citas cristianas, cuando era adolescente y joven.
Y para el crédito de mi iglesia, insistieron en este punto, en casa, constantemente.
Escuché tanto que no debería tener sexo antes del matrimonio, que realmente creía que llegar a él, virgen, era lo único importante. ¿El problema? En el proceso, llené mi corazón y mente de lujuria, y secretamente luché con la pornografía.
Lo que la iglesia necesita enseñar, es la importancia de una mente pura. Esto requiere disciplina, restricciones y abstinencia de actividades que no promueven la santidad. Pero el sacrificio vale la pena.
Una mente pura debe ser el más grande regalo que puedas dar a tu futuro cónyuge. Te permite llegar al matrimonio con una consciencia limpia. Sin cargas. Sin comparaciones. Sin arrepentimientos. Solo tú, tu cónyuge y Dios.
No salgas con alguien que no quiera honrar la pureza contigo. Nunca.
Recuerda. Si estás saliendo, no has entrado en el vínculo sagrado del matrimonio. No has hecho ningún pacto. Entonces, la persona con la que sales, no es tuya.
Practica la pureza. Pero entiende que la pureza, comienza con la mente y el corazón.
No Salgas Si Eres Dependiente De Alguien Para Cosas Que Solo Dios Puede Proveer
Si pudiera ponerme de rodillas y rogarte que sigas uno de estos principios, sería este. Salir y casarse no es para aquellos con confían en la otra persona para la alegría, la paz y el propósito.
Las salidas co-dependientes llevan a matrimonios co-dependientes. Y estos finalmente se desmoronan porque el peso puesto sobre ellos es demasiado grande.
Dios debe estar en el centro de tu vida, antes de que consideres salir en citas. Si no lo es, la pureza estará en un segundo plano. Las citas con miras al matrimonio estarán en segundo plano. De hecho, cada principio discutido en este artículo, es nulo e inválido, sin Dios en el centro.
No comiences a salir sin la seguridad del amor de Dios para ti, y un sólido entendimiento del evangelio.
Via Charisma Magazine