Vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor.
2 Pedro 1:5-7
Por Dios. Necesitamos cuidar genuinamente de las necesidades de los demás y, por lo tanto, debemos tratar de estar dispuestos a mostrarles ese cuidado de manera práctica después de orar por ellos. Puede que nosotros mismos no tengamos los recursos, pero tal vez conozcamos a otros que sí los tengan, a quienes podamos dirigirlos. Debemos tratar de romper los ciclos de injusticia en la vida de las personas en lugar de perpetuarlos, especialmente en el nombre de servir al Señor. Además, nunca debemos aprovechar la confianza sagrada que otros nos están dando cuando se hacen vulnerables al permitirnos orar por ellos. Las cosas malas, bajo el disfraz del ministerio, han sido perpetradas en personas vulnerables antes en la historia del cristianismo. Asegurémonos de que no añadimos nada a la lista.
ORACIÓN
Padre, hay tanta injusticia en nuestro mundo hoy. Ayúdame a mostrar tu bondad y a manejar cuidadosamente la confianza sagrada que has puesto en mí para guiar a otros por tu bondad hacia la salvación de tu amado Hijo.
Debemos tratar de romper los ciclos de injusticia en la vida de las personas en lugar de perpetuarlas, especialmente en el nombre de servir al Señor.
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