Pero ellos darán cuenta al que está preparado para juzgar a los vivos y a los muertos. 6 Porque por esto también ha sido predicado el evangelio a los muertos, para que sean juzgados en carne según los hombres, pero vivan en espíritu según Dios.
1 Pedro 4:5-6
Tres rostros de Jesucristo – Novio, Rey y Juez – serán revelados y enfatizados en las actividades sin precedentes del Espíritu Santo al final de los tiempos. La revelación del Esposo es lo que Dios usará para restaurar el primer mandamiento al primer lugar. Ver al apasionado Amante nos hará apasionados amantes de Dios. La revelación del Rey nos hará operar en el poder de Dios al salir a recibir la gran cosecha. La revelación del Juez nos hará participar con Él en la pérdida de Sus juicios. Al acercar tu corazón hacia Él, anímate de que una nueva y poderosa dimensión de Su presencia está esperando para desplegarse; es el misterio de las edades eternas, el Esposo celestial y tú, Su amado. El poder explosivo de esta revelación los cambiará y los preparará para enfrentar los desafíos de santidad, compasión y belleza que les esperan en la gloriosa era en que viven.
ORACIÓN
Jesús, has despertado en mí un amor apasionado por ti. Te ruego que me llenes con Tu poder para ganar a los perdidos para Ti. Yo pierdo Tu juicio en este mundo y oro para que Tú me permitas traer una cosecha de almas a Tu reino.
Abre tu corazón al apasionado Amante que está alborozado y entusiasmado por ti incluso mientras estás madurando en Él.