“Porque os celo con celo de Dios; pues os he desposado con un solo esposo, para presentaros como una virgen pura a Cristo.”
-2 Corintios 11: 2
La revelación del novio fue predicada por el apóstol Pablo. Pablo vio su ministerio como el casamiento de los incrédulos a través de la conversión a Cristo, presentándolos como una novia pura.
En la identidad de este ministerio, concretamente, como novia del Novio, operamos de manera muy diferente a aquellos sin esta revelación. Obtenemos nuestra identidad a través del poder de la relación con Dios mismo.
Cuando considero a Dios el Esposo, primero pienso en su deseo por nosotros. ¡Oh, regocijarnos con el amor de Dios! Nada es más fortalecedor que la revelación de Dios llena de satisfacción, el Dios que tiene un intenso deseo por los seres humanos y que nos corteja a través de los placeres espirituales.
ORACIÓN
Dios, dame una nueva revelación de ti mismo como el novio que espera por mí, su novia. Dirige mi corazón hacia ti, y permíteme ayudar a preparar el camino para que otros se conviertan en tu novia, entre tanto aceptan el sacrificio de tu Hijo.
Como novia somos valientes, porque estamos conectados a algo mucho más grande que nosotros mismos.