Cindy Trimm
«Venga tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo».
—Mateo 6:10
¿Cuán dispuesto estás a jugarte para que el Reino de Dios pueda manifestarse en tu medio? Una cosa es predicar el evangelio en nuestras congregaciones y ver a la gente llegar a conocer a Jesús; otra muy distinta es traer la salvación en todos sus aspectos a nuestros vecindarios y comunidades. Para establecer verdaderamente el Reino de Dios en la tierra, es probable que se requiera vidas enteras concentradas; sin embargo, si aplicamos la diligencia de un William Wilberforce o del Dr. King, Dios nos permitirá ver victorias—victorias importantes—en el tiempo de nuestra vida. ¿Estamos dispuestos a pagar el precio del tiempo dedicado a la oración para ver que estas cosas ocurran? ¿Haremos hoy lo que es necesario hacer para que nuestros hijos vivan en un mañana mejor?
Oración
Padre, me comprometo a pagar el precio para ver la transformación en la tierra. Por la autoridad que tengo a través de la sangre de Jesús, pido la paz en lugar de la delincuencia y la violencia; el crecimiento económico en vez de la carencia; líderes servidores en vez de codiciosos y corruptos. Padre, llena la atmósfera sobre mi comunidad y sobre mi nación con tu gloria y hazla propicia para el empoderamiento económico y la renovación espiritual. Venga tu reino y hágase tu voluntad. En el nombre de Jesús, amén.
Tomado del Libro Devocional Declara Bendición Sobre Tu Vida de Cindy Trimm