«Levanten los ojos al cielo; miren la tierra aquí abajo: como humo se esfumarán los cielos, como ropa se gastará la tierra, y como moscas morirán sus habitantes. Pero mi salvación permanecerá para siempre, mi justicia nunca fallará»
—Isaías 51:6
Si tan solo más creyentes entendieran que Dios es inmutable, que nunca cambia. Dios nunca cesa un atributo, para ejercer otro. Por ejemplo, Él nunca disminuye Su santidad, cuando ejerce Su amor y tierna misericordia. Ninguna de las cualidades de Dios, disminuye en lo más mínimo. De hecho, cuando un aspecto inmutable de la naturaleza de Dios, está aparentemente en conflicto con otro de Sus inmutables atributos, es en ese lugar que contemplarás Su grandeza.
Oración
Dios, cuán maravilloso es saber que nunca cambias. Cuando todo alrededor de mí, y en mí, está lleno de cambios y confusión, Tu amor constante me rodea, y me mantiene seguro.
Lo que Dios siempre ha sido, siempre lo será.